Terminado el acto inaugural del Gasoducto Néstor Kirchner en la localidad de Salliqueló, el presidente Alberto Fernández le ordenó a los operarios que rápidamente comenzaron a desarmar la carpa y el escenario para sacarse la foto con los dirigentes más leales.
Rápidamente, Santiago Cafiero, Julio Vitobello, Gabriela Cerruti, Victoria Toloza Paz, Eduardo Valdéz y Vilma Ibarra rodearon Alberto que mostró una sonrisa de oreja a oreja que no había tenido en todo el acto, alzaron los dedos en V e inmortalizaron el momento.
Luego, la vocera Cerruti se encargó de subir la foto a su cuenta de Twitter y con ello, tratar de capitalizar la inauguración de «la obra pública más importante de la democracia», como definió el propio Alberto Fernández que había quedado desdibujado durante el acto.
El vacío que sufrió el Presidente fue tan evidente que no le quedó otra que elogiarse el mismo. «Como soy peronista, le puse el pecho y pudimos salir adelante. ¡General, he cumplido!», dijo Alberto, en un poco conocido arranque de peronismo ortodoxo.
En consecuencia, una vez finalizado el acto, el mandatario le pidió a los trabajadores, ansiosos por desarmar la estructura, que demorasen unos minutos para sacarse la foto en la que subió al jefe de Gabinete y compañero de fórmula de Massa, Agustín Rossi: «Sigamos adelante con la convicción de que unidos se logran grandes cosas! ¡Viva la Patria!», escribió Cerruti para acompañar la imagen.
